Brasil está emitiendo señales más tranquilizadoras para la Argentina desde lo económico. Hay actividad y consumo y esto contribuye a las exportaciones argentinas; las únicas posibles complicaciones provendrían de las recientes medidas burocráticas para dosificar importaciones, si es que prosperan los reclamos de los industriales brasileños, como los de otros países que piden represalias contra Buenos Aires.
Los datos de noviembre mostraron que las ventas minoristas en el vecino país aumentaron más de lo esperado, con un crecimiento de 1,3% respecto de octubre, según informó el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). El mercado esperaba 0,5%. En términos interanuales, el aumento en las ventas al por menor fue de 6,8% en comparación con noviembre de 2010. Y en cuanto a la facturación, la suba registrada fue de 1,3% mensual y de 10,9% interanual.
También en materia de inflación los resultados fueron adecuados. El gobierno brasileño logró cumplir con su meta de inflación para 2011. Los datos oficiales mostraron que la suba del índice de precios al consumidor de Brasil fue de 6,5%, en el límite máximo del objetivo oficial de 4,5% con un margen de más o menos 2 puntos porcentuales. Para este año, un sondeo del Banco Central revela que la inflación se ubicaría dentro de la meta oficial en 5,32%.
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