La jornada ya se presentaba como positiva desde que por la mañana se conoció en Alemania un buen dato sobre la confianza de los empresarios en Münich. Ayudó más tarde que España pudiera colocar deuda con una tasa de apenas 1,88% anual, casi un tercio de lo que pagó en la última licitación de deuda. Y el buen clima se consolidó con la mejora de 9,3% en el inicio de casas nuevas en EE.UU., dato considerado clave por los analistas para determinar el ritmo de actividad económica.
Por eso las Bolsas fueron las primeras en reaccionar positivamente. Europa subió 2,7% en promedio según el Stoxx50 y Wall Street ganó en torno a 3% en todos sus indicadores, permitiendo que el Dow Jones regresara arriba de los 12 mil puntos.
Pero lo importante es que se percibe un menor riesgo de recesión global, lo que impactó muy favorablemente en los precios de las materias primas industriales. El petróleo avanzó 3,6% a u$s 97,22 por barril de WTI y el cobre mejoró 2,1% en Nueva York.
Los granos también siguieron en terreno positivo, impulsados además por los pronósticos de un clima seco en América latina. El trigo avanzó 1,3%, el maíz 1% y la soja 0,7%.
La Bolsa porteña se benefició del mejor clima internacional y el Merval subió 1,7%, aunque no tanto como el Bovespa que acompañó al mundo con una mejora de 2,9%. Pero los bonos argentinos volvieron a dar la nota, con subas de hasta 3,9% en los cupones atados al crecimiento y en los bonos en dólares más líquidos. En el primer caso, hay un atractivo rendimiento en el papel, y en el segundo caso, un destino para la cobertura de fondos de compañías de seguros y petroleras que están ingresando al país, obligadas por las normas oficiales. (A.C.)
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